Polen de abejas - Beneficios y propiedades

El polen de abejas es un producto de grandes cualidades nutricionales. Hace ya mucho tiempo que los apicultores, que se habían dedicado a espiar atentamente a las colmenas, observaron entre otras cosas tan extrañas como interesantes, que las larvas de las abejas crecían prácticamente a ojos vistas. De hecho se pudo establecer que estas larvas multiplicaban alrededor de 1500 veces su propio peso sólo en seis días. Un tal régimen de crecimiento era lo indicado no sólo para maravillar a los amigos de la naturaleza sino también para despertar el interés de los hombres de ciencia, siempre al acecho de este género de fenómenos, pues quien dice régimen de crecimiento extraordinario dice nutrición adecuada.

Como por otra parte se conoce desde la más alta antigüedad el valor nutritivo y las benéficas virtudes de la miel, el caso de las larvas resultaba todavía mas digno de interés. Pero tuvo que pasar bastante tiempo para descubrir que, golosas, las abejas se guardan la miel para si mismas y que no es la miel lo que utilizan para alimentar sus larvas sino otra sustancia: el polen de las flores.

Como es sabido, el polen es la simiente masculina de las flores, simiente que el viento o los insectos se encargan de diseminar y hacer llegar al pistilo femenino de las mismas especies botánicas. Constituido de corpúsculos cuya dimensión es del orden de 50 milésimas de milímetro solamente, este polvo impalpable contiene en potencia la energía y todos los principios necesarios para la formación de una planta, un fruto o quizás un gran árbol. He aquí el secreto de la prodigiosa vitalidad de las larvas de las abejas.

A fuerza de pacientes observaciones se descubrió también el sistema de recolección y preparación del polen por las abejas. Mientras otras abejas obreras pecorean el néctar, primera materia que sirve para fabricar la miel, las abejas especializadas en mantener las larvas recogen el polen en el corazón de la flor, con un poco de néctar lo aglutinan en forma de pelotas y lo llevan al panal en una especie de minúsculas canastillas situadas en el hueco de sus patas posteriores.

Es de este preparado que los especialistas han estudiado las posibilidades de utilización por el hombre, convencidos de que el polen es energía vital en estado puro, ya aque en el hay abundancia de vitaminas, calcio, fósforo y otros oligoelementos. El polen contiene todos los principios vitales para el desarrollo del ser y esto en un compuesto tan complejo que solamente la naturaleza podía elaborar.

La administración de el polen de flores a personas de cualquier edad y condición ha demostrado que tiene los efectos más saludables, sin provocar jamás trastorno alguno. Es muy beneficioso en casos de estreñimiento crónico. En las colitis, como en las colibacilosis, también han sido observados resultados interesantes. Algunos enfermos que sufrían diarreas crónicas resistentes a los tratamientos mediante antibióticos han mejorado a tomar polen.

El polen de abejas provoca una recuperación muy rápida y espectacular del peso y de las fuerzas en los convalecientes, siendo un notorio euforizante. En la edad avanzada sus efectos son así mismos extraordinarios.

En los niños anémicos se observa, gracias al polen, una rápida subida del nivel de hemoglobina en la sangre. A esto hay que añadir que muchas personas han estado consumiendo polen natural durante largos periodos sin que jamas hayan registrado fenómenos de intolerancia.

Niños en crisis de crecimiento, convalecientes, personas agotadas, tan numerosas en esta época, personas con tendencia a envejecer prematuramente, es decir, en todos aquellos casos en que la vitalidad es baja o el organismo se halla debilitado, el polen apícola se ha reveladocomo un revitalizante soberano y un fortificante dinamizante sin par.

Por otra parte se ha constatado que, sin ser un laxante, el polen de abeja es probablemente el más perfecto regulador de las funciones intestinales descubierto hasta ahora. Por paradójico que pueda parecer acaba en algunos días solamente con los estreñimientos más tenaces y también con el relajamiento intestinal. Son muchas las mujeres que se veían obligadas a tomar diariamente un laxante más o menos irritante y que elpolen de miel ha librado definitivamente de esta obsesiva preocupación, proporcionándoles al mismo tiempo en la mayor parte de los casos la alegría de vivir y el bienestar general. Según el doctor Robert Le Bihan, en los trastornos intestinales el polen no tiene parangón tanto en el estreñimiento como el la colitis.

El polen puro pues, se halla inscrito sin posible duda como uno de los grandes elementos de la dietética moderna que aspira a paliar las carencias de nuestra sofisticada alimentación habitual. En efecto, los trastornos intestinales, los descensos de vitalidad como la senilidad precoz son provocados esencialmente ya sea por acumulación de residuos nocivos para el organismo, que conducen progresivamente al envenenamiento de las células, o por la ausencia de principios activos indispensables o de algún elemento purificador suficientemente eficaz. Pues bien, el polen de abeja, recogido por las abejas, contiene precisamente los elementos necesarios tanto revitalizadores como purificadores.